Perdonenme por el atraso, pero es que me ha costado mucho aceptar y atreverme a hacer esta confesión.
Bueno para que lo entiendan debo empezar por el principio... fue hace mas o menos 8 meses, estaba sentada como ahora aburrida frente al computador...abrumada y deseperada de ver las mismas paredes que me ahogaban, el aire esta espeso, un calor frio dominaba el ambiente... Frente a esto me vi obligada a tomas una drastica desición, agarré mi querida parka negra michelin agarre las 3 cosas primordiales en la vida (llaves, celular y billetera) y con los bolsillos abultados salí a la calle.
Generalmente camino hacia el oriente, pero esta vez necesitaba algo diferente, así que partí trumbo plaza italia, a ritmo de abuela de providencia que sale con su enfermera. Miraba para todas partes, esperando que algo inesperado me sucediera, pero nada... solo pasto y gente con cara aburrida, ahhh y tambien muchos, muchos autos.
Al ver que la cosa no mejoraba, decidí tomar el toro por las astas y buscar por mi misma esa experiencia religiosa que necesitaba con urgencia. Y así fue, caminaba yo por providencia, a la altura de eliodoro Yañez, cuando derrepente ví a un sujeto un tanto peculiar y son nisiquiera pensarlo, lo comenzé a seguir, tratando de que no se diera cuenta. Al principio todo parecia normal, caminaba a paso relajado, seguro de su destino.... sin embargo derrepente lo vi entrar a un callejon que nunca había visto, .. ups perdon de ahi sigo